La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó la solicitud de Google para suspender partes clave de una orden judicial que exige cambios en su tienda de aplicaciones Play Store. La decisión se enmarca en el litigio iniciado por Epic Games, desarrollador de Fortnite, que acusó a la empresa de prácticas anticompetitivas en el ecosistema Android.
La orden fue emitida por el juez federal James Donato, quien determinó que Google deberá permitir la descarga de tiendas de aplicaciones rivales dentro de Play y compartir su catálogo con competidores. Estas disposiciones entrarán en vigor en julio de 2026, aunque otras medidas comenzarán a aplicarse este mismo mes.
Entre los cambios inmediatos, el juez ordenó que los desarrolladores puedan incluir enlaces externos en sus aplicaciones, lo que permitirá a los usuarios realizar pagos fuera del sistema de facturación de Google. Epic Games argumentó que esta práctica restringía la competencia y elevaba los costos para consumidores y creadores.
En julio, un tribunal federal de apelaciones confirmó la decisión del juez Donato, lo que fortaleció la posición de Epic Games en el caso. Google, propiedad de Alphabet, anunció que continuará con el proceso de apelación, aunque deberá cumplir con las disposiciones vigentes mientras se resuelve el litigio.
La demanda forma parte de un debate más amplio sobre el control que ejercen las grandes tecnológicas sobre las plataformas digitales. “Los consumidores merecen opciones reales”, señaló Epic Games en documentos judiciales. El caso podría sentar precedentes sobre la competencia en tiendas de aplicaciones móviles y el acceso a sistemas de pago alternativos.