Elon Musk, CEO de Tesla, decidió pausar el proyecto de la gigafactory en Nuevo León, México, hasta después de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, previstas para el 5 de noviembre de 2024. Esta decisión responde a la incertidumbre sobre la política comercial del candidato republicano Donald Trump, con quien Musk mantiene una relación cercana.
Musk explicó que, si Trump, quien ha prometido imponer aranceles a los productos mexicanos, resulta electo, esto podría afectar negativamente a las inversiones de Tesla en México. “Creo que debemos ver qué pasa con la elección. Donald Trump ha dicho que pondrá aranceles a los vehículos producidos en México. Así que no tiene sentido invertir mucho en México si eso va a pasar”, comentó Musk durante una teleconferencia con inversores y medios.
Elon Musk ha manifestado su apoyo a Trump y ha comprometido donaciones significativas a su campaña presidencial. Ante esta situación, Musk opta por resguardar las inversiones millonarias previstas para la gigafactory, que originalmente se esperaba que iniciara su construcción en marzo de 2024 y comenzara a operar en 2026.
Tesla, que anunció la construcción de la planta en Nuevo León en 2023, continuará aumentando su producción en sus instalaciones actuales en Texas, donde también se producirán nuevos productos como el robotaxi y el robot humanoide Optimus. La revisión del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) en 2026, que incluirá un análisis del avance en contenido regional para el sector automotriz, también influye en la decisión de Musk.
A pesar de la especulación sobre una inversión de 10 mil millones de dólares, Tesla no ha confirmado cifras oficiales para el proyecto en México.