Thyssenkrupp Steel Europe ha anunciado que, como parte de su estrategia industrial para enfrentar los desafíos del exceso de capacidad y la creciente competencia de importaciones baratas, reducirá su plantilla en un 40% para 2030. Esto implica la eliminación de aproximadamente 5,000 empleos y la transferencia de otros 6,000 a proveedores externos.
El ajuste, que afecta a una empresa con alrededor de 27,000 empleados, se ejecutará a través de un proceso de optimización de la red de producción y una racionalización significativa de la administración. Se estima que esta reorganización permitirá una reducción del 10% en los costos laborales, ajustándolos a un nivel competitivo.
Dennis Grimm, CEO de Thyssenkrupp Steel Europe, destacó que, a pesar de los esfuerzos por evitar despidos operativos, la medida es esencial para mantener la competitividad en el mercado global. Según Grimm, esta adaptación requerirá un “gran esfuerzo” por parte de la compañía y de sus empleados.
Este plan se enmarca dentro de un proceso de reestructuración más amplio que tiene como objetivo asegurar la sostenibilidad y competitividad de la empresa en los próximos años.