La industria farmacéutica enfrenta un desafío que, en parte, ella misma ha causado. Tan eficaz han sido sus productos para extender la vida de las personas, que el costo total del consumo de medicamentos está poniendo a prueba los límites de la rentabilidad en todo el mundo.
Para tomar en cuenta la manera en que las empresas farmacéuticas pueden responder, Watson-Marlow Fluid Technology Group (WMFTG) ha trabajado junto con los principales expertos del sector para abordar distintas opciones que permitirían suministrar nuevos medicamentos con más rapidez y a menor costo, a fin de satisfacer las crecientes necesidades de una población cada vez más envejecida y con presupuestos de salud más limitados.
El nuevo informe es un trabajo conjunto entre el Instituto Nacional de Investigación y Capacitación en Bioprocesamiento, O’Hara Technologies y Watson-Marlow Fluid Technology Group.
Desde 1960, la expectativa de vida promedio de América Latina ha aumentado más de 20 años, con el resultado de que actualmente más personas sufren enfermedades crónicas. En México, las tasas de diabetes triplican a la tasa de crecimiento demográfico, y casi el 20 % del gasto en salud pública se destina a esta enfermedad.
Está previsto que en Brasil los costos de atención médica aumenten drásticamente del 7 % del PIB en 2006 al 13 % del PIB en 2030. Esta presión sobre los sistemas de salud fuerza a las empresas farmacéuticas a suministrar medicamentos de forma más eficiente que nunca. La presión por minimizar costos recae mayormente sobre todas las etapas del proceso de desarrollo y producción de medicamentos.
Si bien la producción de nuevos medicamentos ha dependido de los avances recientes de la tecnología de producción, es necesario innovar más. El artículo, redactado en conjunto por los líderes de la industria John Milne, director de capacitación del Instituto Nacional de Investigación y Capacitación en Bioprocesamiento; Jim Marjeram, director de tecnología de O’Hara Technologies; y el Dr. Chris Palmer, gerente de productos de mangueras de WMFTG, aborda el crecimiento del procesamiento continuo y su impacto sobre la producción farmacéutica.
“El procesamiento continuo no es un concepto nuevo”, comenta Jim Marjeram. “La industria farmacéutica lo incorporó de forma relativamente lenta, debido en parte a cuestiones normativas. Después de todos estos años, los participantes de la industria farmacéutica comprenden ahora las ventajas comerciales del procesamiento continuo, por lo que estamos comenzando a ganar terreno”.
John Milne agregó: “El procesamiento continuo plantea un gran número de retos de ingeniería, como la integración de los distintos sistemas de proceso y el cumplimiento de las exigencias normativas. Esto no debe desalentarnos de adoptar nuevas técnicas, pero exige un análisis cuidadoso a la hora de designar las mejores alternativas para los procesos individuales”.
Descargue el artículo para descubrir más información de estos expertos y de sus perspectivas únicas sobre la producción continua en la industria farmacéutica.