Volkswagen, anunció un acuerdo con los sindicatos para recortar más de 35,000 empleos en Alemania hacia 2030. Esta medida, equivalente a un tercio de su plantilla en el país, busca reducir costos y garantizar la continuidad de las operaciones en sus diez plantas alemanas.
La compañía proyecta ahorrar 4,000 millones de euros a mediano plazo, según informó en un comunicado. Los recortes se realizarán mediante jubilaciones no sustituidas, evitando despidos forzosos, como confirmó Thorsten Gröger, negociador del sindicato del automóvil.
A cambio, los empleados aceptaron renunciar a ciertas primas y reducir la capacidad de producción en algunas fábricas. Thomas Schäfer, responsable de la marca Volkswagen, destacó que las negociaciones se centraron en ajustar los costos laborales y de desarrollo, logrando soluciones viables en estas áreas.
Volkswagen enfrenta desafíos como la ralentización mundial de las ventas, la competencia de China y dificultades en la transición hacia vehículos eléctricos. Este plan de ahorro es parte de los esfuerzos por recuperar su competitividad.