Los principales fabricantes de vehículos en Estados Unidos —entre ellos General Motors, Ford, Tesla y Toyota Motor— solicitaron al gobierno de Donald Trump prolongar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), al que consideran clave para la producción automotriz nacional.
Las empresas presentaron sus comentarios ante la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos, como parte del proceso previo a la revisión formal del acuerdo en 2026. Aunque respaldan su continuidad, también propusieron ajustes para mejorar su implementación.
Un grupo que representa a los tres principales fabricantes de Detroit afirmó que el T-MEC “permite a los fabricantes de automóviles que operan en Estados Unidos competir a nivel mundial a través de la integración regional, que ofrece ganancias de eficiencia”. Esta integración, añadieron, representa “decenas de miles de millones de dólares en ahorros anuales”.
La industria automotriz ha sido uno de los sectores más beneficiados por el tratado, especialmente en lo que respecta a cadenas de suministro regionales, producción compartida y exportación de vehículos. Los fabricantes advirtieron que cualquier cambio debe preservar estos beneficios y evitar interrupciones en el flujo comercial.
La revisión de 2026 será determinante para el futuro del acuerdo, considerado por el sector como un instrumento estratégico para la competitividad regional. Las empresas esperan que el gobierno mantenga un enfoque que favorezca la integración y la eficiencia operativa.






