La empresa siderúrgica British Steel, filial de la china Jingye, informó que planea cerrar sus dos altos hornos en Scunthorpe, al este de Inglaterra, debido a las condiciones del mercado y los aranceles impuestos por Estados Unidos al sector del acero. Esta medida podría afectar entre 2,000 y 2,700 empleos, según fuentes cercanas al caso.
La compañía indicó que ha iniciado un proceso de consulta con empleados y sindicatos sobre los despidos. Además del cierre de los altos hornos, British Steel también planea reducir la capacidad del laminador de acero en la misma planta. La empresa estima que sus operaciones están generando pérdidas diarias de 700,000 libras (aproximadamente 900,000 dólares).
Los aranceles del 25% al acero y al aluminio impuestos por el expresidente estadounidense Donald Trump han afectado la rentabilidad del sector. Mientras que la Unión Europea (UE) respondió con medidas de represalia, el Reino Unido ha optado por negociar un acuerdo con Estados Unidos para obtener exenciones.
British Steel, que actualmente emplea a 3,500 personas en el Reino Unido, fue adquirida en 2020 por la empresa china Jingye tras enfrentar dificultades financieras. Desde entonces, el grupo ha invertido más de 1,200 millones de libras (unos 1,550 millones de dólares) para mantener sus operaciones. A finales de 2023, la compañía ya había manifestado su intención de sustituir los altos hornos por equivalentes eléctricos, aunque no se han confirmado fechas concretas para estos cambios.
La empresa aún evalúa las fechas exactas para el cierre, considerando la posibilidad de que ocurra a principios de junio de 2025.