El fabricante chino de automóviles BYD evalúa instalar una planta de baterías en Europa, como parte de su estrategia para ampliar la producción de vehículos eléctricos e híbridos enchufables en la región. La decisión responde al crecimiento proyectado en ensamblaje local y a la necesidad de fortalecer su cadena de suministro.
Actualmente, BYD construye dos plantas de ensamblaje en Europa: una en Hungría, que iniciaría operaciones a finales de 2025, y otra en Turquía, prevista para 2026. Ambas instalaciones tendrán una capacidad conjunta de 500 mil vehículos al año.
La vicepresidenta ejecutiva de BYD, Stella Li, señaló que el objetivo es fabricar localmente todos los vehículos eléctricos que se comercialicen en Europa en un plazo de tres años. También indicó que los híbridos enchufables dominarán las ventas del grupo en el corto plazo.
Durante una conferencia en Milán, el asesor especial de BYD para Europa, Alfredo Altavilla, afirmó que el grupo aún debe decidir si prioriza una tercera planta de ensamblaje o una instalación dedicada a la producción de baterías. “No tiene sentido invertir en el ensamblaje de autos en Europa pero traer baterías de China”, dijo.
Altavilla agregó que factores como el costo de la energía serán determinantes para definir nuevas ubicaciones industriales, debido al alto consumo energético de las fábricas de ensamblaje y de baterías.