La empresa tecnológica Google anunció una inversión de 40 mil millones de dólares en el estado de Texas, destinada a fortalecer su infraestructura de inteligencia artificial (IA) y servicios en la nube. El proyecto, que se desarrollará hasta 2027, contempla la construcción de tres nuevos campus de centros de datos, así como programas de capacitación laboral y mejoras en la accesibilidad energética, según informó la oficina del gobernador Greg Abbott.
Durante el anuncio oficial en Midlothian, el director ejecutivo de Google y Alphabet, Sundar Pichai, destacó que esta iniciativa busca “impulsar la nueva era de la innovación en inteligencia artificial” y generar miles de empleos en el estado. La inversión también incluye la creación de un Fondo de Impacto Energético de 30 millones de dólares, orientado a apoyar proyectos locales ante el creciente consumo energético de los centros de datos.
Texas se ha convertido en un punto estratégico para el desarrollo de infraestructura tecnológica, gracias a su mercado energético desregulado y al acceso a fuentes renovables. Sin embargo, el aumento de la demanda eléctrica ha generado inquietudes sobre la estabilidad de la red, especialmente tras los apagones provocados por las tormentas invernales de 2021.
La competencia entre gigantes tecnológicos como OpenAI, Microsoft, Meta, Amazon y Google por expandir sus capacidades de IA ha intensificado la inversión en el estado. Proyectos como Stargate, de OpenAI, con un valor estimado de 500 mil millones de dólares, y las instalaciones de Meta en Fort Worth, reflejan el interés por consolidar a Texas como un hub tecnológico de alcance global.
Además de Google, empresas como Tesla, Oracle y Samsung han trasladado operaciones clave a Texas en los últimos años. La planta de semiconductores de Samsung en Taylor, con una inversión de 17 mil millones de dólares, y la sede de Tesla en Austin, son parte de esta tendencia que vincula el desarrollo tecnológico con la infraestructura energética del estado.






