Stellantis anunció la reapertura de dos plantas en Estados Unidos y Canadá tras llegar a un acuerdo con el sindicato United Auto Workers (UAW). La planta de ensamblaje en Detroit, Michigan, producirá la nueva generación del SUV Dodge Durango, mientras que la planta de Belvidere, Canadá, fabricará una nueva camioneta a partir de 2027, conforme a lo pactado en el contrato sindical de 2023.
De acuerdo con el sindicato UAW, la dirección de Stellantis aseguró el cumplimiento de compromisos previamente incumplidos, como la asignación de estos proyectos a ambas plantas.
Además, Stellantis invertirá en la planta de Kokomo, Indiana, para construir la Fase II del motor GME-T4 EVO a partir de 2026, cancelando planes iniciales de trasladar la producción fuera de Estados Unidos. También se confirmó que no habrá cambios en la actual producción del motor en Dundee y que se aumentará la producción de componentes en la planta de Toledo.
Finalmente, en México, Stellantis enfrentó desafíos tras la amenaza de sanciones a las automotrices que importaran vehículos a Estados Unidos. A pesar de ello, sigue en pie la expansión de la planta en Saltillo para producir la Ram 1500 a partir de 2025.
La información fue revelada tras una reunión entre directivos de Stellantis y el presidente de Estados Unidos.