Stellantis ha anunciado la suspensión de la producción del Fiat 500 eléctrico en la planta de Mirafiori, Italia, durante un mes debido a la baja demanda. La medida, que se extenderá hasta el 11 de octubre, responde a la falta de pedidos y a las dificultades actuales en el mercado europeo de vehículos eléctricos.
La empresa explicó que la suspensión es una respuesta a las “graves dificultades” que enfrenta el mercado de vehículos eléctricos, especialmente en Europa. Stellantis sigue comprometida con la continuidad de sus operaciones y está trabajando para superar esta fase de transición.
La compañía también ha anunciado una inversión de 100 millones de euros para dotar al Fiat 500 eléctrico de una nueva batería de alta potencia y aumentar su producción. Además, Stellantis planea lanzar una versión híbrida del Fiat 500 en la planta de Mirafiori para 2025 o 2026.
Este anuncio llega en medio de tensiones con el gobierno italiano, que ha acusado a Stellantis de trasladar la producción a países con costos más bajos, afectando a las plantas italianas. La producción de Stellantis en Italia ha disminuido un 25.2% en el primer semestre del año, con una caída del 35.9% en vehículos excluyendo los comerciales.
Stellantis, que incrementó su producción en Italia en 9.6% el año pasado, se había comprometido a alcanzar un millón de unidades para 2030, meta que no se ha logrado desde 2017.