China emerge como un buen socio para las inversiones en las industrias automotriz y minera de México, señaló la subsecretaria de Economía, Luz María de la Mora. Es muy probable que inversionistas chinas vengan a México, se establezcan y desarrollen productos, dijo en entrevista para la agencia Xinhua.
Precisó que una vez en vigor el acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), China puede convertirse en el más importante inversionista en el país latinoamericano. En ese papel, puede formar parte de los esfuerzos del nuevo gobierno para delinear los pilares comerciales de la innovación, la inclusión y la diversificación.
Algunos abastecimientos podrían llegar desde China, otros ser mexicanos, y la idea es que la cadena productiva de América del Norte siga en crecimiento, señaló también. México ya importa de China maquinaria, equipos y productos semiterminados, los cuales dependiendo de los casos podrían ir a Estados Unidos, Canadá y otras partes del mundo, añadió.
Exportaciones mexicanas también contribuyen a la promoción de los vínculos entre Estados Unidos y China, pues una parte del capital chino en Estados Unidos participa del proceso productivo mexicano y los productos terminados van a Estados Unidos, puntualizó. De la Mora afirmó que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador tiene gran interés en la promoción de las relaciones entre México y China.
Recordó que el país asiático compra muchas de las exportaciones mexicanas de minerales, por ejemplo cobre o zinc, pero hay que pensar en como se puedan procesar minerales en México gracias a inversiones chinas. Otros rubros comerciales son autopartes, acero y hierro o electrónica, lo que en conjunto ha hecho que el capital chino pase de siete mil millones de dólares en el año 2000 a 90 mil millones en 2018.
En alimentos y agricultura, México está avanzando en los protocolos sanitarios que le permitan exportar sorgo y plátanos a China, que se sumarán a las actuales ventas de tequila, aguacates, frutos rojos o carne de puerco, entre otros. Recordó que México y China tienen intereses comunes en los asuntos globales y ambos son miembros de varias organizaciones multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), Banco Mundial, la Organización de las Naciones Unidas o el Grupo de los 20 (G20).
“Somos una fábrica global, estamos integrados y cada quien contribuye en una parte de la cadena productiva, por ello pienso que China puede contribuir con México y encontrar en nuestro país un socio ideal que agregue valor y siga creciendo la cadena de valor, concluyó.