China desarrolla un modelo de tren bala de doble piso, correrá inicialmente a 160 kilómetros por hora; tendrá potencial para llevar el velocímetro hasta los 350, lo cual marcar la pauta del sector ferroviario.
La Academia de Ciencias está a cargo del proyecto y los ingenieros aseguraron que una vez superados algunos aspectos técnicos para mantener la estabilidad, entonces será capaz de hacer los recorridos tan rápido como los de una sola planta.
Entre los problemas a resolver están el control de las fuerzas centrífugas al subir la velocidad y el alto centro de gravedad de los trenes.
Según se anunció, Alemania y Francia ya mostraron interés en adquirir el nuevo modelo, porque es superior en términos económicos y de capacidad en el traslado de pasajeros.
En septiembre de 2017 China elevó de 300 a 350 la velocidad de su tren bala actual, el Fuxing, como parte de sus planes para tener el más rápido del mundo.
Además, a fines del mes pasado probó con éxito una nueva generación del tipo maglev (de levitación magnética) que puede correr a 160 kilómetros por hora, o sea, un 60 por ciento más rápido.