El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su desacuerdo con la resolución de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, que bloqueó de forma temporal la transferencia de tierras necesaria para el desarrollo del proyecto Resolution Copper, impulsado por las compañías Rio Tinto y BHP en el estado de Arizona.
La medida judicial representa un nuevo obstáculo para el avance de uno de los proyectos mineros más relevantes en territorio estadounidense, enfocado en la extracción de cobre, un recurso estratégico para la industria energética y tecnológica.
A través de una publicación en Truth Social, Trump calificó al tribunal como un “tribunal de izquierda radical” y cuestionó a los opositores del proyecto, señalando que “son antiestadounidenses y representan a otros países competidores en cobre”.
El proyecto Resolution Copper ha enfrentado oposición por parte de comunidades locales, grupos ambientalistas y representantes indígenas, quienes han manifestado preocupaciones sobre el impacto ambiental y cultural de la iniciativa. La decisión judicial, aunque temporal, detiene el proceso de cesión de tierras federales que permitiría avanzar en la fase operativa del proyecto.